No pasará.

D- Casi estoy seguro, mi mujer está enamorada de otro.
M-  ¿Pero qué dices?
D- Lo que oyes.
M- ¿Estás seguro? ¿Cómo lo sabes?
D- Es algo complicado, una intuición, la extraña sensación de que ella ha cambiado.
Ahora todo me cuadra, su querer ir cada vez más a reuniones familiares
y sus acomodadas posturas frente a mí.
M- ¿Y quién es?
D- Roberto.
M- ¿Qué Roberto?
D- Roberto Díaz, joder, Robertito (alias sensible)
M- ¡Joder David...pero si  es el marido de su hermana! ¿Te refieres a ese Roberto?
D- El mismo.
M- No entiendo. Realmente ¿Qué te hace pensar en esa idea?
D- Cómo lo mira últimamente....flirteando ante el barranco..
M- ¿Cómo lo mira?Jajaja estás de vuelta tío...
D- Si de vueltas, seguro....ya te digo que es una sensación, ella ha cambiado.
M- Pero vamos a ver...ese tío es un pardillo, tú le das mil vueltas en todo.
Si yo fuera una señora, creo que no pondría mis ojos en su calva más de 30 segundos.
No sé ¿tú le das a tu mujer lo que necesita?
D- ¿Lo que necesita?
M- Me refiero  al sexo,  al afecto y todo eso.
D- Pues a ver, que se yo...es algo complicado. Ella está distante, rígida, con sus cosas en la cabeza y nunca le apetece..
M- A ver macho, ¡ya está bien!
Tu mujeres es una señora, ¡que estás hablando del marido de su hermana!.... ¡Su querida hermana! siempre de la mano, tema Sagrado... ¡joder!  ¡ Ella no le haría eso a su hermana!
Tu eres su marido, todo un  señor. Un tío con carácter, atractivo para muchas mujeres, inteligente, con un buen pelo, si te pones, hasta tienes más pasta, buen carisma, más alto y fornido, con más cultura..
¡vamos que de las hermanas,  a María le tocó el gordo de navidad!
¿Qué aventura sería esa para tu mujer?
D- La imposible, la inalcanzable. La mejor y la peor de las fantasías.
Jamás tendrá esa aventura y eso es lo que realmente me asusta.