miércoles, 13 de febrero de 2013

Hoy es un día raro.
Un día de esos un poco eclécticos, donde no sabes muy bien si eres feliz ó no.
Un día donde te identificas con todo y a la vez te sientes no encajar en nigún lugar. Un día raro.
No sale el sol, no hace demasiado frío, al menos no ese frío de un día horrible de invierno...No, no hace viento, y el cielo tiene un color entre azul, gris y amarillo, quizá triste y rabioso, como mi corazón, hoy.
Uyy tengo que ir a hacer mil cosas que no he hecho.Tengo, tengo tengooo....
Tengo que escribir una carta a Movistar, hoy es un día que no sé escribir cartas de reclamación.
¿Por qué? Pues porque  seguramente les diría algo así:  "Hola me llamo Marta y es una caca lo que me estáis haciendo, así que me dais de baja mi seguro de móvil ahora mismo ú os voy a patear en la culo!!
No puedo decir algo así, no? mejor dejar la carta para mañana.
Lo que pasa es que si dejo la carta para mañana, mi padre crítico, que es muy simpático él, ya me dá la brasa con sus mensajes "Marta, tienes que escribir a esa gente, que te está robando nuestro dinero! no te das cuenta, uyyy quizá mañana tampoco escribas la carta, quizá nunca escribas esta carta y te pases toda la vida pagando el seguro...y quizá no te hagan ningún caso porque ellos son fuertes y tu voz no cuenta"....iros a cagar!
Bueno pues lo dicho que hoy es un día raro, en el que tengo ganas de salir corriendo a dar vueltas por la cuidad, a descargar mi enfado.

Y escribo porque es importante para mí descargar esta ira, y sí ha dejado de ser un día raro, ha salido el sol. Buenos días.


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