martes, 19 de noviembre de 2013

Hija, perdóname

No sé que más decirte
Hice lo que pude. No sabía hacerlo mejor.
Estaba asustado.
Estaba enfadado con tu madre, no era contigo.
Tú eras una niña.
Perdona mi ausencia.
Perdona mi rígida presencia.
Perdona por no dejarte toser cuando estabas enferma,
por no pasar ratos contigo los domingos.
Perdona por no confiar en tí de verdad.
Por no ver tu miedo en la noche, por no contarte cuentos, por no cogerte de la mano.
Perdona por mi agresividad latente,
por mi cara de preocupación.
Por no hayar respuesta a tus dudas.
Perdona por quitarme el bigote sin tu permiso.
Perdona por no verte,
por no querer conocer a tus amigos, a tus novios.
Perdona hija.
Perdona mi miedo, mi terror a quererte, a sentir,
por no montar contigo en bici,
por estar y no disfrutar.
Por no llevarte al cole,
por no creerme desde el principio lo importante que tú eras para mí.
Lo importante que yo era para tí.
Perdona por no tener en cuenta tus palabras,
por mi miedo al fracaso
por mirar con miedo a todas incluyéndote a tí.
Perdona por mi machismo encubierto.
Perdona por no llevarte nunca al cine,
por no enseñarte mi mundo.
Perdona por no haberme perdonado,
 por no haber perdonado que mi madre se muriera cuando era tan sólo un bebé.
Perdona por mi miedo a que tú también te murieras. A que te enfermaras.
Perdóname por no ver quién eras

No hay comentarios:

Publicar un comentario